sábado, 13 de octubre de 2012

CHEITY CHINOOK



Una de las experiencias más deprimentes que uno podía sufrir en la Barcelona preolímpica era asistir a fiestas de artistas donde te rodeaban conversaciones en que se defenestraba la pintura como práctica artística en favor de otras como la fotografía e instalaciones, con argumentaciones que sospechadamente no obedecían a una evolución personal sino al influjo de la comercialidad de las galerías y todo con una anodina música de fondo que en nada estaba en sintonía son supuestas prácticas vanguardistas. Cuando de allí salía un tanto asfixiado me reconfortaba acordarme de Cheity y de como pese a su glamour y presencia, se había centrado en su pinturas y sus gatos eludiendo sabiamente todo este tipo de eventos o el potencial de una de las salidas de la pintura de entonces como era eso que se llamó pop surrealista.

Conozco a Cheity desde 1978 cuando ella apenas tenía catorce años y rápidamente nos hicimos miembros de Xeerox, ya entonces esboza  sus primeros dibujos que desembocarían en carteles para conciertos de Clinic Humanoids o Ultimo Resorte formaciones clave del punk barcelonés. Tras un paréntesis largo en el tiempo descubrí en sus casa que su definitiva vocación de pintora la había materializado en una inquietante imaginería de realidad daimónica y alienigena, criaturas perdidas entre diosas y demonios practicando celebraciones paganas. Su influencia musical posiblemente lo puede uno encontrar en su poderoso y enérgico trazo en alguien como Siouxsie o en el obscurantismo de The Residents, combinaciones que la pueden emparentar con Elda Gisela Ford discípula de alguna manera de la tenebrosa Rosaleen Norton o también con surrealistas como Maruja Mallo y Leonor Fini rodeada como Cheity de un montón de gatos.













Arcadas de color intenso en espirales ascendentes y descendentes. Universos mutables emergentes, territorio felino, sublimaciones varias. Imágenes multidimensionales rescatadas del obscuro pero fascinante inframundo de la psique.

Introducción de su blog Laguna Estigia donde puedes encontrar estas ilustraciones y muchas más de su obra.




3 comentarios:

  1. He conocido a Cheity a través de un amigo común. Nunca nos hemos visto ni hablado en persona. Sus cuadros me llamaron la atención desde el principio. Me parecen increibles!!. Y por lo poco que sé, y lo mucho que publica en su página de face, además de pintar maravillosamente, se me antoja un ser humano muy bello.

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